La deshidratación infantil es más común de lo que parece. Pocas veces los padres cuentan los vasos de agua simple que sus hijos beben al día y por ende, desconocen si ellos ingieren el mínimo diario.
Como todos sabemos, perdemos agua incluso cuando respiramos, también cuando hacemos ejercicio y obviamente cuando vamos al baño, en el caso de los niños, se pierden cantidades importantes de líquido y sodio cuando hacen rabietas y lloran desconsoladamente, al jugar al aire libre, cuando tienen fiebre, diarrea y vómito.
Esos componentes se deben reponer de forma inmediata para no caer en la deshidratación.
¿Cómo darme cuenta que mi hijo está deshidratado?
De acuerdo a Kids Health, si su hijo tiene fiebre, diarrea o vómitos, o está sudando mucho en un día caluroso o mientras practica una actividad física intensa, esté pendiente de los signos de deshidratación, que incluyen los siguientes:
- Boca seca o pegajosa
- Ausencia o escasez de lágrimas al llorar
- Ojos hundidos
- En los bebés, fontanela de la parte superior de la cabeza hundida
- Orinar menos o mojar menos pañales que de costumbre
- Piel seca y fría
- Irritabilidad
- Somnolencia o mareos.
En verano las personas sudan más de lo normal por lo que es necesario beber más agua de lo usual, si su hijo practica deporte o tiene actividades al aire libre, lo recomendable es que lo haga beber un vaso de agua simple antes de empezar el entrenamiento.
Recordemos que la sed es un indicador de que ya existe deshidratación, usted no debe esperar a que su hijo le pida agua para darle.
Recordemos que la sed es un indicador de que ya existe deshidratación, usted no debe esperar a que su hijo le pida agua para darle.
Tratamiento para niños con deshidratación moderada y severa
Si bien, un leve grado de deshidratación no atenta directamente contra la vida de nadie, si interfiere con el estado de salud y concentración y puede desencadenar otros problemas de salud.
Por ejemplo, si su hijo toma poca agua sufrirá de estreñimiento y por ende, hará más fuerzas al evacuar… llegando a padecer hemorroides. ¿Ridículo no? Bueno, eso se puede evitar simplemente bebiendo las cantidades correctas de agua y comiendo frutas y verduras.
En los casos profundos de deshidratación se administra una solución de rehidratación oral, sobre todo si tienen diarreas explosivas o vómitos frecuentes.
Cuando los líquidos corporales que se han perdido no se pueden reponer, en estos casos es posible que el niño necesite recibir líquidos por vía intravenosa (VI), es decir, hidratación celular.
Si bien, un leve grado de deshidratación no atenta directamente contra la vida de nadie, si interfiere con el estado de salud y concentración y puede desencadenar otros problemas de salud.
Por ejemplo, si su hijo toma poca agua sufrirá de estreñimiento y por ende, hará más fuerzas al evacuar… llegando a padecer hemorroides. ¿Ridículo no? Bueno, eso se puede evitar simplemente bebiendo las cantidades correctas de agua y comiendo frutas y verduras.
En los casos profundos de deshidratación se administra una solución de rehidratación oral, sobre todo si tienen diarreas explosivas o vómitos frecuentes.
Cuando los líquidos corporales que se han perdido no se pueden reponer, en estos casos es posible que el niño necesite recibir líquidos por vía intravenosa (VI), es decir, hidratación celular.
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